Exit tax en la Unión Europea: claves fiscales del traslado de empresas y activos
La Directiva (UE) 2016/1164 armoniza el impuesto de salida en la UE para evitar la deslocalización fiscal y asegurar que las plusvalías latentes tributen antes del traslado.

Tiempo de lectura: 8 minutos
🏁 Introducción
El exit tax europeo es una medida de armonización fiscal introducida por la Directiva (UE) 2016/1164, también conocida como ATAD I (Anti Tax Avoidance Directive).
Su finalidad es evitar que las sociedades trasladen su residencia o sus activos a otro país sin tributar por las plusvalías latentes generadas mientras operaban en el Estado de origen.
En otras palabras, garantiza que los beneficios acumulados no escapen a la tributación simplemente por cambiar la sede o los activos a otra jurisdicción.
🏛️ Origen y entrada en vigor
La Directiva 2016/1164/UE del Consejo, de 12 de julio de 2016, estableció por primera vez un marco común europeo para combatir la elusión fiscal.
Su artículo 5 regula el denominado impuesto de salida o exit tax aplicable a sociedades.
Los Estados miembros debían transponerlo a sus legislaciones nacionales antes del 1 de enero de 2020, y hoy todos los países de la Unión Europea lo aplican, con ligeras variaciones según su normativa interna.
⚖️ Qué pretende el exit tax europeo
El impuesto de salida tiene una finalidad clara:
- Evitar que una empresa traslade su sede, activos o establecimiento permanente fuera de un Estado miembro sin tributar por la revalorización generada mientras estuvo bajo su soberanía fiscal.
- Impedir que una compañía difiera indefinidamente la tributación de sus plusvalías simplemente cambiando de país.
En resumen, se trata de preservar la equidad tributaria dentro del mercado único europeo.
🧾 Cuándo se aplica
El artículo 5 de la Directiva 2016/1164 obliga a gravar las plusvalías latentes en cuatro situaciones:
- Traslado de activos de la sede central a un establecimiento permanente en otro Estado miembro o fuera de la UE.
- Traslado de activos de un establecimiento permanente situado en un Estado miembro hacia su sede u otro país.
- Traslado de la residencia fiscal de la sociedad a otro Estado.
- Transferencia de la actividad económica de un establecimiento permanente a otro país.
En todos estos casos, el Estado de origen puede exigir el impuesto sobre la diferencia entre el valor de mercado y el valor fiscal de los activos en el momento del traslado.
⏳ Aplazamiento del pago
Para no vulnerar la libertad de establecimiento reconocida por los Tratados de la UE, la Directiva prevé que, cuando el traslado se produzca dentro de la UE o del Espacio Económico Europeo (EEE), el contribuyente pueda aplazar el pago del impuesto durante un máximo de cinco años.
De esta forma, el impuesto sigue existiendo, pero su cobro se difiere, siempre que los activos permanezcan bajo una jurisdicción que coopere en asistencia mutua y recaudación fiscal.
⚖️ Relación con la jurisprudencia del TJUE
El mecanismo del exit tax europeo está inspirado en la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que había analizado casos similares:
- C-9/02 – Hughes de Lasteyrie du Saillant (Francia, 2004): el TJUE consideró que gravar automáticamente las plusvalías al trasladar la residencia vulneraba la libertad de establecimiento.
- C-371/10 – National Grid Indus (Países Bajos, 2011): el Tribunal aceptó el exit tax si se permite aplazar el pago cuando el traslado se produce dentro de la UE.
La Directiva 2016/1164 incorporó precisamente este equilibrio: 👉 permite a los Estados gravar las plusvalías latentes, pero sin obstaculizar la movilidad empresarial dentro del mercado interior.
🗺️ Aplicación por países
Todos los Estados miembros de la Unión Europea han transpuesto ya el artículo 5 de la Directiva 2016/1164.
Algunos, como Alemania, Francia o los Países Bajos, ya disponían de normas equivalentes antes de 2016 y solo tuvieron que adaptarlas; otros introdujeron un régimen nuevo.
Entre los países que aplican plenamente el exit tax corporativo se incluyen:
🇩🇪 Alemania · 🇫🇷 Francia · 🇪🇸 España · 🇮🇹 Italia · 🇳🇱 Países Bajos · 🇧🇪 Bélgica · 🇱🇺 Luxemburgo · 🇦🇹 Austria · 🇩🇰 Dinamarca · 🇫🇮 Finlandia · 🇸🇪 Suecia · 🇵🇹 Portugal · 🇮🇪 Irlanda · 🇨🇿 Chequia · 🇵🇱 Polonia · 🇭🇺 Hungría · 🇸🇮 Eslovenia · 🇸🇰 Eslovaquia · 🇬🇷 Grecia · 🇭🇷 Croacia · 🇷🇴 Rumanía · 🇧🇬 Bulgaria · 🇨🇾 Chipre · 🇲🇹 Malta
Se puede pues afirmar que este mecanismo es hoy común a toda la UE.
👥 Extensión a las personas físicas - potestad nacional
Aunque la Directiva 2016/1164 regula solo el exit tax para sociedades, varios Estados han decidido ampliar el principio a las personas físicas en su legislación nacional del IRPF, gravando las plusvalías latentes de quienes trasladan su residencia fiscal a otro país.
Países con “exit tax personal” vigente:
- 🇫🇷 Francia – Code général des impôts, art. 167 bis (1999, reformas 2011, 2019, 2023)
➤ Para saber más, lee nuestro articlo sobre El Exit Tax en Francia.
- 🇪🇸 España – Ley 35/2006 del IRPF, art. 95 bis (2015)
➤ Para saber más, lee nuestro articlo sobre El Exit Tax en España.
- 🇩🇪 Alemania – Außensteuergesetz §6 (2006)
- 🇩🇰 Dinamarca – Danish Tax Assessment Act §38 (2008)
- 🇵🇱 Polonia – Ley del IRPF, arts. 30da–30dh (2019)
Estos regímenes no derivan directamente de la Directiva europea, pero se inspiran en el mismo principio de territorialidad fiscal y han sido diseñados para respetar la jurisprudencia del TJUE.
🧭 Conclusión
El exit tax europeo es una herramienta de armonización fiscal corporativa que busca impedir la deslocalización artificial de beneficios dentro del mercado único.
Desde su entrada en vigor en 2020, todos los Estados miembros de la Unión Europea lo aplican, garantizando que las plusvalías latentes tributen antes del traslado de activos o sede.
Además, algunos países —entre ellos España y Francia— han extendido el principio al ámbito del IRPF, lo que da lugar a los llamados exit tax personales, lo que demuestra la creatividad de ciertos países para evitar al máximo la salida de sus contribuyentes.
Última revisión: noviembre 2025



